“Los fuertes en la fe debemos apoyar a los débiles, en vez de hacer lo que nos
agrada.”
Hemos estado hablando sobre el valor de enfrentar nuestras faltas. Cuando nos enfrentamos a nuestras faltas, otros estarán más abiertos a admitir sus faltas.Al enfrentar nuestras propias faltas, somos capaces de interactuar con otras personas. Cuando vemos a otros desviándose de la fe, en lugar de juzgarlos, podemos mirar más allá de su apariencia culpable y tratamos de entender las razones por las que se están desviando de la fe.Podemos concentrarnos en las necesidades y preocupaciones que Dios nos está revelando, en lugar de condenarlos en su debilidad y dejarlos atrapados en su pecado. Tanto Pablo como Santiago nos enseñan que aquellos fuertes en la fe deben tomar su fortaleza y apoyar a los débiles. Los que viven en el Espíritu deben de seguir y restaurar aquellos que han vuelto a caer en las viejas formas de vida, los caminos del mundo (Romanos 14-15, Gálatas 6; Santiago 5).Nos preparamos para "tener consideración de los que son sensibles a este tipo de cosas. No debemos agradarnos solamente a nosotros mismos. Deberíamos ayudar a otros a hacer lo que es correcto y edificarlos en el Señor." (Romanos 15:1-2 ).Animamos a las personas a aceptar su individualidad (ser ellos mismos) y rechazamos el individualismo (que viven para sí mismos). Cristo nos aceptó, y eso nos alienta hacia la madurez espiritual, ahora podemos reflejar el corazón de Jesús, ofreciendo la aceptación a los demás.
Pablo como Santiago nos enseñan que aquellos fuertes en la fe deben tomar su fortaleza y apoyar a los débiles.
La Fortaleza es para el Servicio
Jon Walker





No hay comentarios:
Publicar un comentario