miércoles, 24 de septiembre de 2014

Lucas 9:61-62




“Otro dijo: —Sí, Señor, te seguiré, pero primero deja que me despida de mi familia. Jesús le 
dijo: —El que pone la mano en el arado y luego mira atrás no es apto para el reino de 
Dios.






Seguir a Cristo no es  una carrera, en la que nosotros trazamos las etapas: "Voy a hacer esto para Jesús, después de que los niños terminen la escuela y se incremente mi cuenta de retiro." No podemos ajustar nuestro servicio, acomodándolo a nosotros mismos, de lo contrario, terminamos sirviendo a Jesús, de acuerdo con lo que tiene sentido para nosotros.Como el discípulo en el versículo de hoy, decimos que obedientemente seguimos a Jesús, pero luego damos la vuelta y decidimos por nosotros mismos lo que debe tener prioridad en nuestras vidas. Esto todavía nos permite estar en control; Podemos lograr cosas buenas, pero eso no nos hace discípulos de Jesús. Jesús dice: “—El que pone la mano en el arado y luego mira atrás no es apto para el reino de Dios”. Juan 9:62 Mirando hacia atrás eso es doble-ánimo (Santiago 1:8, 4:8). Nos hace inestables e indeterminados, y eso es exactamente lo contrario del enfoque que Jesús espera de nosotros. Esto significa que hay momentos en nuestra relación con Jesús, cuando decimos: "Me pondré en contacto contigo, Jesús, tan pronto como termine con mis prioridades".¿Estás poniendo a un lado a Jesús hasta que encaje en tu agenda? o ¿Hasta qué atravieses esta etapa de tu vida? Si Jesús te da convicción, que no es lo mismo que condenación Él quiere lo mejor para ti, y Él sabe que encontrarás lo mejor cuando lo sigues. 





 Él quiere lo mejor para ti, y Él sabe que encontrarás lo mejor cuando lo sigues. 




Jesús Establece tus Prioridades






Jon Walker





No hay comentarios:

Publicar un comentario